Silencio.

¡Shh! Calla.

Que nadie lo sepa.

Silencio, calla, no lo grites. Escóndete, que no te vean. Ocúltate tras lo que no tienes, eres mucho más fuerte que todo esto. Que no te descubran, será tu perdición.

Jamás reveles el secreto que esconden tus ojos curiosos. No muestres el deseo llameante que guarda tu corazón, porque te pisotearán, te abasallarán, te convertirán en una mísera partícula de polvo, un ridículo rayo de luz indecisa.

No grites, recuerda, nadie debe saber que tú eres especial.